Acerca de
Oscuro, amargo y aromático, el grano de cacao venezolano alimentó un comercio informal vital y dinámico en el Caribe suroriental durante los siglos XVII y XVIII. Según las rígidas leyes mercantiles españolas, el comercio de este codiciado cacao más allá de España o México era ilegal y se suprimía activamente como contrabando; sin embargo, las autoridades holandesas en Curazao, Bonaire y Aruba (islas ABC) alentaron las interacciones comerciales con la vecina tierra firme venezolana, abiertamente violando las fronteras económicas interimperiales.
Este comercio informal entre las islas holandesas y la Venezuela colonial española prosperó durante más de dos siglos, seduciendo a una diversidad de marineros transimperiales y movilizando productos vitales. En él, comerciantes curazoleños le vendían cerámicas europeas indispensables, junto con textiles y alimentos, a una Venezuela crónicamente desabastecida por las flotas de aprovisionamiento españolas, mientras que cerámicas venezolanas viajaban a bordo de los barcos cargados de cacao, pieles, mulas y tabaco que retornaban a las islas ABC, para allí satisfacer necesidades domésticas y cotidianas.
Haciendas cacaoteras del siglo XVIII, puntos de contrabando en la costa central de Venezuela, rutas comerciales informales (amarillo) y puntos de trasbordo (rojo).
Si bien se sabe mucho sobre la historia socioeconómica y política de este comercio de larga data, no se sabe nada de sus dimensiones materiales y cómo las cerámicas que se comercializaban cambiaron o mantuvieron las identidades y las relaciones de género de las sociedades coloniales en las islas y en el continente. La pregunta de investigación central del proyecto ArCarib es: ¿de qué manera impactó el comercio marítimo informal de cerámica en el Caribe suroriental de los siglos XVII y XVIII en la vida cotidiana de las comunidades de las islas ABC y de la costa venezolana, en particular sus procesos de formación de identidad y relaciones de género?
Este proyecto interdisciplinario de arqueología histórica emplea el novedoso marco teórico y metodológico de conjuntos de práctica, desarrollado por el IP, para contrastar críticamente la evidencia arqueológica, arqueométrica y documental nueva y existente y contestar la pregunta central. Este primer estudio arqueológico transfronterizo entre las islas ABC y Venezuela rompe esquemas, revelando cómo a través del comercio informal los colonizados contribuyeron agencialmente a las dinámicas de continuación o cambio en las identidades y relaciones de género de sus comunidades, más allá de las políticas restrictivas y aculturadoras del imperio colonizador. Este proyecto generará datos completamente nuevos que profundizarán nuestro conocimiento interdisciplinario del contrabando y el comercio informal en contextos coloniales modernos.